Capitulo 65 Saludo particular.

Capitulo 65 Saludo particular.

-¡¡Atravesó su corazón!! –exclamo Yui.

El agua bajaba a su posición normal y la escena era impactante; Tonnosuke atravesando el corazón de Izaya con su espada…un pequeño hilo de sangre bajaba por la boca de Izaya y todo apuntaba a la victoria de Tonnosuke. Yui y Miory veían la escena con un poco de alivio y admiración.

-Lo…logro, no puedo creerlo –pensaba Miory.

Tonnosuke apareció frente a las hermanas y comenzó a caminar hacia donde se encontraba su antiguo destino. Izaya seguía en pie, con la espada aun incrustada en su corazón, pero no daba señales de que agonizara ni sufriera, seguía con la misma expresión fría.

-Espera un momento… ¿acaso no debe morir ya? –dijo Miory.

-¿Morir? Para nada, es un simple saludo –respondió Tonnosuke.

-¡¡¿¿Saludo??!! –gritaron las hermanas en unísono.

-No me digan que creyeron que era una batalla a muerte… –dijo Lizza.

-¿No lo era? –pregunto Yui.

-¡Ja, ja, ja, ja, ja, ja! Son los dos herederos mas fuertes…si hubiera sido una batalla a muerte, eso hubiera provocado una gran catástrofe –explicaba Toko mientras se burlaba de las hermanas.

-No puede ser, alguien tan fuerte…no existe –pensaba Miory aterrada.

-Vaya, eso ha sido rápido…aunque es tu primera vez atravesándome el corazón –dijo Izaya ignorando todos los comentarios anteriores.

-He estado practicando, ahora mi técnica del Iai ha mejorado bastante.

(Nota: la técnica del Iai consiste en desenfundar su espada, realizar el corte, y volver a enfundar su espada rápidamente, era una técnica usada en los samurais)

-Lo pude notar, ahora si me disculpas…tengo cosas que hacer –dijo Izaya.

-Tu siempre tan ocupado…Izaya –dijo Tonnosuke –Mándale saludos a Lucy-sama de mi parte.

-¡Lizza! ¡Toko! Hora de marcharnos –dijo Izaya ignorando a Tonnosuke.

-Si, señor.

Izaya y sus subordinados caminaban por el camino donde las hermanas y Tonnosuke habían llegado, después de que se perdieran a la vista Miory corrió hacia el lugar donde había dejado su equipaje. Al llegar no encontró nada mas que unas cuantas ropas tiradas y las maletas hechas un desastre, reviso donde había traído la comida y no encontró nada mas que una lata de atún vacía.

-… ¿Qué paso…con nuestras cosas…? –dijo Miory apunto de explotar en ira.

-Me gustaría saber lo mismo –dijo Yui.

-¿Galletas? –ofreció Tonnosuke.

-¡¡¡Galletas ni que ostias!!! ¡¡¿¿DONDE DEMONIOS ESTAN MIS COSAS??!! ¡¡MI COMIDA!! –grito Miory furica.

-Quizás fue un lad—

-¡¡No me importa que haya sido!! ¡¡Definitivamente lo matare!! –interrumpió Miory.

-Hermana, ¡calma! –dijo Yui.

Mientras tanto, Kaiba se encontraba sentado en el mismo lugar, un sonido de huesos crujiendo y siendo destrozados se escuchaba. En las costillas del cuerpo de Kaiba, se formaban unas costillas de una estructura ósea similar a la de los brazos. La cara de Kaiba mostraba dolor absoluto, junto con desesperación.

-Debo apresurarme…o me encontraran –pensaba Kaiba mientras se intentaba regenerar.

Finalizada su regeneración, Kaiba se apresuró a correr, por las ramas de los árboles, llego a la cima donde la catarata caía y siguió corriendo cada vez mas deprisa. Volvía su mirada hacia atrás, hizo un gesto de queja, y siguió apresurándose cada vez más.

-Maldita sea, muy tarde, debo practicar mi regeneración –dijo Kaiba mientras apresuraba el paso.

Tras Kaiba, iban nada mas y nada menos que el grupo de Raiton, Haruka y Kyousuke. Corrían tras el después de tanta búsqueda. Minutos antes, Kaiba había sentido sus espíritus a lo lejos acercándose, asi que forzó una regeneración en sus costillas para poder huir sin problemas, pero obviamente eso le había quitado tiempo y para cuando su trabajo había terminado, estaban casi pisándole los talones.

-¡Apresúrate! No podemos perderlo –dijo Kyousuke.

-Por si no lo sabias…soy una humana común y corriente, par de fenómenos –se quejo Haruka.

-¡Cállense ambos y apresuren el paso! –dijo Raiton imponiendo respeto.

-¡¡No nos des ordenes, ser inferior!! –gritaron Kyousuke y Haruka haciendo parecer a Raiton un débil sirviente.

-Debo practicar mas mi liderazgo –pensó Raiton.

Kaiba ideo un plan mientras huía y paso a movilizarse. Se detuvo por un instante y cargo lo que parecía un “Elemental” en su brazo derecho, al momento de estar a diez metros de distancia de sus perseguidores, golpeo el suelo de arena bajo sus pies, haciendo que toda la arena se esparciera con un poco de fisión eléctrica, por lo que pasar sobre esa pared de arena podía resultar peligroso. Todos se detuvieron antes de impactar con el muro de arena y Kaiba corrió aun más rápido.

-¡Maldita sea! Lo vamos a perder –dijo Haruka.

-Solo sigan su rastro en cuanto el bloqueo de arena se desvanezca –dijo Raiton.

-¡Al fin pensaste algo bueno! –dijo Haruka burlándose de Raiton.

-Cállate, humana –dijo Raiton.

-Mira quien lo dice, noticias de última hora… ¡tú también eres humano estupido fenómeno! –respondió Haruka.

-Mejor me callo –dijo Raiton aceptando la derrota.

Pasaron las horas, y la oscuridad de la noche y el brillo de la luna dominaron la planicie donde se encontraban las hermanas Miya y el tercer heredero. Habiendo logrado construir un campamento, se acentuaron para poder descansar, y después de que Miory obligara a Tonnosuke a que pescara algo para poder comer, ahora solo esperaban que su pescado se terminara de cocinar….

-Chicas yo…quería decirles algo hace unas horas, pero no pude decírselos, por mi falta de voluntad –interrumpió Tonnosuke el silencio que reinaba.

-Sabia que nos ocultaba algo –pensó Yui.

-Es hora, de que les diga la verdad, sobre mí, y sobre ustedes…sobre nosotros…