Capitulo 82 Locura…locura en todos lados.

Capitulo 82 Locura…locura en todos lados.

-¿Qué rayos…? ¡¿Es ese Raiton?! –exclamaba Haruka al ver la loca expresión de este.

-Eso parece… ¿Qué le ha sucedido? –le respondió Kyousuke.

-No se ve que sea bueno…hay que determinar que le sucede ¡vamos!

Raiton levantaba a Kaiba del suelo después de arrastrarlo treinta metros por toda la zona, Kaiba no podía defenderse tan bien ya que lo que Mandoliel había provocado en su brazo le limitaba sus movimientos, además de ser diestro…Por otra parte, Mandoliel estaba algo impresionado ya que no esperaba tal ataque con tal velocidad, asi que se dedicaba simplemente a observar lo que sucedía.

Un golpe a la parte baja del estomago dejando por un breve momento suspendido en el aire a Kaiba, una patada que lo mando diez metros de distancia, aprovechando su gran velocidad Raiton apareció antes de que Kaiba chocara contra el suelo golpeándole esta vez dándole con el codo y provocando un gran dolor de espalda a su enemigo y dejándolo respirar, ya que el también se había agotado.

-Je…je, je… ¡¡Ja, ja, ja, ja!! –reía Raiton mientras respiraba rápidamente.

-Eso, ha dolido bastante…ese ultimo golpe, me dolió mucho –decía Kaiba mientras se levantaba después de una breve golpiza.

Kaiba limpiaba el hilo de sangre que le bajaba del labio inferior, tomo una posición que indicaba la decisión al combate y al ver la cara maniática de Raiton tampoco pudo aguantar la risa, ambos reían a carcajadas con muchas ganas, tanto que empezaban a dar miedo…de repente ambos desaparecieron y aparecieron en otro lugar dándose de golpes mientras no paraban de reír. La batalla era algo particular pero era muy atrayente a la vista, las luces que provocaban la electricidad de ambos era fabulosa y los golpes simultáneamente rápidos eran de una forma…graciosa ya que la risa de los combatientes apoyaba la idea.

Ambos seguían dándose de golpes con una sonrisa de oreja a oreja en sus rostros, parecía no importarles el dolor, ambos comenzaban a sangrar en ciertos puntos de la cara pero no les importaba en lo mas mínimo, solo se daban de golpes fuerte y velozmente sin medir consecuencias, una lucha de locos. De pronto ambos combatientes se alejaron para tomar un descanso nuevamente, jadeaban y limpiaban la suciedad en sus caras conservando sus sonrisas maniáticas y su mirada desquiciada

-Has mejorado malditamente, incluso comienzas a caerme bien –dijo Kaiba.

-Lo mismo digo –respondía Raiton.

En ese preciso momento Kyousuke y Haruka hicieron su aparición intentando determinar que es lo que sucedía con su aliado, se habían puesto de acuerdo antes asi no había necesidad de pensar en un plan y que los locos lo supieran. Se separaron y comenzaron el ataque, Haruka golpeaba presionando fuertemente a Raiton alejándolo mas del combate mientras Kyousuke se colocó pocos metros de distancia de Kaiba…separándolos por completo, seguido llego a su ayuda Mandoliel que dejo de ser un espectador para volver a ser un participante.

-Antes de reanudar…dime ¿Quién eres y que quieres? –le dijo Kyousuke a su nuevo “compañero”.

-Un simple amigo que quiere ayudar…Kyousuke, Rey de sombras…

Kyousuke tuvo un ligero momento de sorpresa al escuchar su titulo…se había ganado ese titulo ya que era el mejor controlando las sombras, nadie llegaba a igualarlo en su manejo y era muy hábil además de su gran experiencia, ganando asi el titulo de parte de su reina y señora Lucy. Solo un demonio con sus años sabría ese titulo, ya que se lo habían puesto desde hace mucho, por eso fue que quedo sorprendido por un segundo, pero debía tomar la calma y concentrarse en la batalla venidera.

Mientras tanto, Haruka seguía golpeando y alejando a Raiton para estudiar el porque de su comportamiento, después de llevarlo bien lejos se detuvo y miraba mientras el demonio echaba a reír. De repente Raiton apareció detrás de la exorcista pero esta en defensa dio una voltereta y le pateo la cara, el demonio seguía persistiendo y seguía atacando rápidamente pero la astuta mujer sabia donde iba a atacar, se defendía de un golpe alejándolo y esperando a que volviera a intentarlo, pero había un problema…comenzaba a agotarse.

Inmediatamente como empezaba a sentir cansancio en un momento dado en el que Raiton llego a agacharse por un simple instante, Haruka extendió su mano sin tocar al demonio y esta le empezó a brillar, Raiton empezaba a gemir y retorcerse horriblemente mientras Haruka estaba pasiva y analizaba la situación mirando seriamente con sus bellos ojos negros a un Raiton que se retorcía desagradablemente.

-Al parecer fueron esos pequeños demonios…no llevan la locura consigo, ellos son la locura, al explotar sus partículas entraron en el cuerpo de Raiton y comenzaron a apoderarse del individuo…en otras palabras, esta ligeramente poseído –pensaba Haruka con un sorprendente poder de deducción.

Haruka movió su brazo hacia delante y le golpeo suavemente la cabeza a Raiton, este ultimo cayendo al suelo, enseguida Haruka volvió a levantar el brazo como si tuviera algo entre sus manos y de pronto apareció un demonio espectral, igual a los pequeños que había lanzado Kaiba anteriormente nada mas que en un tamaño mas aumentado, inmediatamente Haruka saco sus atractivas armas y las lanzo rodeando por completo al demonio, jaló de ellas y descuartizaron a la bestia quedando en una pose genial, con la sangre esparcida complementando la escena semejantes a fuegos artificiales, algo digno de ver.

-Sin embargo…es muy inútil –dijo Haruka mientras comenzaba a caerle una lluvia de sangre.

Raiton cayo débil a los pies de Haruka, mientras esta iba a ayudar a Kyousuke y Mandoliel. Estos últimos estaban en una dura lucha contra Kaiba quien no cedía terreno, a pesar de enfrentarse a dos a la vez era un enemigo formidable, tenia controlada la situación. En determinado momento en que ambos se abalanzaron contra el para atacarle al mismo tiempo, aprovecho para provocar una confusión y atacar a aquel que le resultaba la mas grande amenaza por ahora…Mandoliel fue atacado violenta y brutalmente con una descarga de sombras proveniente del puño de Kaiba, golpeándole en la parte de atrás de la nuca y lanzándole bruscamente contra un grupo de árboles que estaban en las cercanías, derribando algunos debido al gran golpe. Kyousuke se dio cuenta rápidamente del peligro que resultaba Kaiba ahora y también llego a percatarse de la presencia de la bella exorcista, que venia con la idea de brindar apoyo a sus compañeros. En respuesta Kyousuke paso al ataque para que Kaiba no atacara a la joven exorcista, colocando una sonrisa de astucia Kaiba atrapo fuertemente con sus manos desnudas a Kyousuke que después fue atrapado por unas sombras de los pies dejándolo indefenso y a las manos de Kaiba, literalmente hablando. Empezó a presionar y sujetar cada vez mas fuerte, al grado de producir gran dolor…minutos después se pudo escuchar un sonido que dejo perplejos a Haruka y a Kyousuke…ese sonido trataba de su brazo siendo destrozado por las manos de Kaiba, convirtiéndose en añicos y haciendo gritar de dolor a su dueño.

Haruka en respuesta saco sus armas para que Kaiba lo soltara, pero este último predijo los movimientos, soltó a su victima de una mano mientras seguía presionando con la otra, extendió su brazo espectralmente atrapando a la joven del cuello y golpeándola contra los muros de roca.

-Es una lastima…una joven tan hermosa y tan fuerte…tener que matarte será un dolor, y un placer tan gigantesco –dijo Kaiba a punto de reír a carcajadas.

Dichas estas palabras, Haruka forcejeaba por su liberación mientras empezaba a sentir los efectos del ahogo por parte de los brazos espectrales gigantescos de Kaiba, de repente este brazo fue cortado por la mitad haciéndolo desaparecer y soltando a la exorcista “¡¿Qué?!”, se sorprendió el demonio que fue golpeado al instante por una patada mandándolo varios metros lejos y liberando por completo a Kyousuke.

-Parece que hemos llegado justo a tiempo…hermana.

-Eso parece, hermana.

Con una pose heroica, con una mirada de confianza y con sus nuevas armas y sin dejar aparte su gran belleza, entran en aparición las hermanas Miya rescatando a Haruka y Kyousuke y llegando a la hora oportuna…

-Espero que no nos hayan olvidado –dijo Miory con un guiño.

Capitulo 81 No me subestimes.

Capitulo 81 No me subestimes.

-¡Je, je, je, je! –reía maliciosamente Kaiba.

Una ola de llamas negras se expandió alejando a aquellos que rodeaban a Kaiba, por alguna razón las llamas no hacían daño sin embargo obligaban a retroceder. Raiton empuñaba sus dos katanas y dirigió su mirada hacia el tipo sospechoso que detuvo a Kaiba, notaba algo extraño en el, en ningún momento había desempuñado su espada y su aspecto estaba muy descuidado, además de tener una mirada demasiado extraña…

-Ya basta de charlatanerías, ha sido suficiente espectáculo por hoy –dijo Mandoliel de repente.

Al decir esto, Mandoliel se dirigió rápidamente al ataque pateando a Kaiba, quien no retrocedió nada mas que unos cuantos centímetros cubriéndose con sus antebrazos, en una respuesta rápida Kaiba de un puño en la cara mando lejos a Mandoliel y apresuradamente observo a los demás que estaban ya en movimiento para el ataque, invoco unos pequeños akumas que persiguieron a los tres restantes mientras seguía encargándose de Mandoliel.

Para Kyousuke los pequeños demonios no resultaron ser un problema, sin complicaciones los destruyó a todos, para Haruka no fue tan diferente, los akumas no llegaron ni a acercársele ya que los destruyo con sus espadas con cadena, sin embargo para Raiton resultaron ser una gran molestia ya que no pudo destruirles a distancia y se acercaron lo suficiente para explotar y liberar locura…locura que comenzaba a afectar a Raiton, sintiendo grandes impulsos de matar y reír sin razón alguna y de destruir todo a su alrededor, aun asi luchaba con esa locura momentánea y lograba mantener la cordura.

En otro lado, Kaiba estaba propinándole una paliza a Mandoliel, desde aquel puño no dejo de golpearle y no pensaba detenerse hasta ver su cuerpo muerto. Lo levantaba del cuello y lo tiraba lejos nuevamente, lo pateaba contra el suelo y después lo tiraba al aire, le arrojaba sombras mientras viajaba hasta allí y después lo golpeo fuertemente con sus dos puños, lo volvió a patear hacia abajo y antes que pudiera caer contra el suelo apareció en su punto de caída para darle un puñetazo en la cara, dejándolo muy malherido…aun asi Mandoliel no hacia ningún esfuerzo por defenderse, lo que era muy extraño si hace poco había mostrado ser muy fuerte. Mientras Mandoliel escupía sangre Kaiba miró hacia donde estaba Haruka, quien venia corriendo al rescate de Mandoliel.

-¡Sigue estando guapísimo! –pensaba Haruka mientras se preparaba para el combate.

Kaiba se volteo completamente listo para recibir a Haruka de un buen golpe, la miraba fija y seriamente su expresión en la cara era tan seria como nunca antes. Al estar frente a frente hubo un muy breve intercambio de miradas e inmediatamente golpes de ambos bandos, Haruka hizo una pirueta muy ágil y le pateo la cara a Kaiba mientras que este ultimo, gracias a la pirueta de su contrincante falló el puñetazo que planeaba darle, Haruka no se detuvo y siguió golpeándole fuerte y rápidamente con mucha agilidad. Kaiba no encontraba manera de defenderse no bloquear algún golpe, simplemente esperaba el momento en que descuidara una pequeña parte de su bellísimo rostro.

Kyousuke llegó en ayuda de Haruka propinándole un golpe tan fuerte a Kaiba que el suelo fue destrozado, la exorcista se sorprendió un poco y retrocedió para cederle el espacio a su compañero. Cuando Kaiba se incorporaba de nuevo, unas sombras surgieron del suelo e intentaron atraparlo, Kyousuke le hizo una señal a Haruka quien inmediatamente empezó a orar, del suelo bajo Kaiba nacía una especie de sello y al instante supo que no era nada bueno. Otras sombras del suelo atacaron a las que ataban a Kaiba liberándolo del problema, y a la milésima de segundo ataco a Haruka golpeándole la cara y haciéndola caer al suelo.

Mientras tanto, Raiton estaba un poco alejado de la acción, la locura incrementaba por cada segundo que pasaba y su lucha interna era enorme, luchaba por que la locura no lo tomara por completo y sea infectado permanentemente, asi que necesitaba estar lejos de todos por un momento.

-Los matare uno por uno –dijo Kaiba al ver a Haruka tirada en el suelo y a Kyousuke listo para detenerlo.

-Espero que no te hayas olvidado de mi presencia –dijo Mandoliel mientras aparecía detrás de Kyousuke.

-¿A semejante estorbo? Creo que no…

Mandoliel apareció frente a Kaiba provocando una gran sorpresa, al loco demonio le tomó unas milésimas de segundo percatarse del ataque por lo que apenas tuvo tiempo de invocar una guadaña, sin embargo la velocidad de Mandoliel era sorprendente, en un segundo desenfundó su katana, le cortó la mano a Kaiba y volvió a guardar el arma con tal destreza que los presentes se encontraban perplejos. Analizando la pequeña cortada, la cual era muy inofensiva a su parecer…algo simple y muy pequeño, no parecía ser que la había provocado una katana de tamaño grande, una muy sencilla herida…

-¡Carajo! ¡Eso fue muy rápido! –Pensaba Kaiba al ver a su atacante saltar en una roca que se encontraba cerca tomando impulso para devolverse.

Las sombras de Kyousuke intentaron volver a tomar a Kaiba lo cual resulto fallido ya que otras sombras bloquearon, al momento Kaiba lleno de furia se abalanzo contra su anterior enemigo atacando de manera descomunal y sin algún plan, simplemente movía su guadaña estupidamente queriendo solo hacer daño. Kyousuke solo miraba fijamente sin querer entrometerse, “Se agotara rápido, en ese momento es cuando debo actuar” pensaba el serio demonio, un ligero ruido le llamo la atención y miro hacia Haruka que estaba aun tirada en el suelo del fuerte golpe que le habían propinado, al instante fue en su ayuda tomándole de la mano.

-¿Estas bien? –preguntó.

-Si, si no te preocupes… ¿Dónde esta ese tipo? –respondió Haruka mientras se levantaba y sacudía el polvo.

-Esta allá con ese otro tipo…tu deberías aprovechar y preparar el sello, ¿y Raiton?

-No lo se…lo perdí de vista al iniciar…

-Que raro, no importa, tú prepara el sello.

Mientras, Kaiba y Mandoliel chocaban armas, el segundo mencionado no desenfundo su arma nuevamente, seguía guardada por alguna razón…dado un momento, Kaiba preparaba un “Elemental” en su brazo derecho, mano en la que fue herido anteriormente…Mandoliel se percato del peligro al que se enfrentaba y apresuradamente volvió a desenfundar su espada.

-Sello numero uno, Vernich…

Justo en el momento en que Mandoliel dijo estas palabras, el brazo de Kaiba se comporto de manera extraña y una luz verde con un sello brillaba en el lugar de la pequeña herida, dejando inmovilizado a dicho brazo.

-¿Qué jod– Kaiba no entendía lo que sucedía, sin embargo no podía moverlo.

-Un pequeño sello inmovilizador…será de mucha ayuda –dijo Mandoliel guardando su arma.

De repente, Kaiba fue fuertemente golpeado por un destello que paso rápidamente, continuamente fue arrastrado por nada mas y nada menos que Raiton, que tenia una gran sonrisa en su rostro.

-¡Te exterminare, Kaiba ja, ja, ja!

Capitulo 80 ¿Ayuda?

Capitulo 80 ¿Ayuda?

-¡Oh!, ¿Dónde están mis modales? Mi nombre es Mandoliel –dijo el hombre que había aparecido frente a Kaiba.

-¿Mandoliel? Ese nombre…me suena –pensaba Kaiba –Además…esos ojos, sin duda son de demonio –finalizo al ver sus ojos negros de pupilas blancas.

-Efectivamente…soy un demonio, pero dejemos las charlas para después, con el que debo charlar es con el verdadero dueño de ese cuerpo –dijo Mandoliel.

-¿¡Que!? ¿Acaso ha leído mi mente…? –Se asustó Kaiba – ¡Eres algo raro! –dijo.

-¡Hmph!

La apariencia de Mandoliel era muy sencilla, el cabello largo lo suficiente para tener una cola de caballo descuidada y caída bajándole por la espalda, tenia una cara de muchas “amigas” y una pequeña y ligera barba en el mentón. Su estatura era de 1.65 por lo que no era tan alto, sus ojos eran de color negros y mas al tratarse de sus ojos de demonio, llevaba puesto un smokin negro haciendo lucir un poco elegante, pero sus ropas estaban sucias y arrugadas parecía ser alguien que acababa de ser despedido de su trabajo, aun asi no tenia tan mal apariencia. Su sonrisa parecía ser tan sarcástica y llena de mentiras…

Kaiba se cansó de tanta charla y apresuro al ataque, invocando la guadaña de sombras, se dirigió de un salto hacia donde estaba Mandoliel y ya estando a centímetros de el lanzo varios ataques con su guadaña, respondiendo al ataque, Mandoliel se puso en defensa con su katana que aun seguía guardada en su funda, y con eso se defendió de los ataques de Kaiba, quien arremetía violentamente cada golpe de su guadaña con una fuerza llena de ira y desesperación por la huida.

Después de tantos ataques continuos Kaiba retrocedió sabiendo que simplemente estaba agotando energías con tan precipitados ataques…tenia que idear algún plan para huir o asesinarlo en el intento, pero para eso tenia que estudiarlo mas. Notaba que no había sacado su katana en ningún instante, incluso se defendió con la katana en su funda, algo que hacia resaltar confianza y habilidad…o quizás simplemente guardaba algo valioso.

-¿Acaso eso ha sido todo? ¡El gran Kaiba, El Rey de la Locura! ¡¡Y solo unos ataques tontos e inútiles ataques fueron dignos de el!! –exclamó Mandoliel.

-¡No te burles! Solo fue calentamiento…

-¡Ambos sabemos que eso no fue un calentamiento! Aunque ciertamente…estoy ganando el tiempo necesario.

Mandoliel volteo su mirada a su espalda y detuvo a Kaiba que estuvo a punto de cruzar la línea que había formado en la tierra, se dio cuenta que no era mas que un clon de akumas y movió su katana que aun seguía guardada en su funda haciendo que la tierra se levantase formando un muro que bloqueo por un instante al verdadero Kaiba. Al instante Mandoliel pasó a la ofensiva y le propinó una patada a su enemigo, tomo su katana y le golpeó con la culata de esta en el mentón, después en la boca del estomago haciéndolo escupir saliva, y por ultimo le golpeó con otra patada lanzándolo lejos de la línea “limite”.

-Este tipo… ¿Qué rayos quiere? –pensaba Kaiba mientras se levantaba y lavaba la saliva de su boca.

-¿Qué tal van esos ojos? ¿Han evolucionado ya? –le dijo Mandoliel mientras caminaba nuevamente donde se encontraba al principio.

-Siguen doliendo mucho… ¿y a ti en que te concierne?

-Hump…esto se torna cada vez más interesante –dijo suavemente Mandoliel con sus ojos cerrados y su sonrisa.

-¡¡No me subestimes maldito!! ¡¡Ahora si iré en serio!! –gritó Kaiba con rabia.

Los brazos en la espalda de Kaiba volvieron a surgir, Mandoliel solo analizaba en próximo movimiento y tomaba fuertemente su katana. Kaiba corrió tan rápido que Mandoliel apenas pudo notar que ya se encontraba a su lado pero fue justo a tiempo, golpeo con su katana guardada en la mejilla derecha pero Kaiba le devolvió el ataque con un gran puñetazo de su brazo espectral negro. Mandoliel fue lanzado quince metros de largo del golpe tan fuerte que le propinó Kaiba pero se incorporó rápidamente y clavó su katana (aun guardada) en el suelo, de repente la tierra empezó a brillar y a destrozarse infligiéndole la duda a Kaiba de cruzar la línea, por lo que se detuvo en seco…inmediatamente Mandoliel de un salto llegó donde Kaiba y le volvió a golpear alejándolo otros diez metros.

-¡¡Mierda!! ¡Este tipo no es tan fácil! –pensaba Kaiba cada vez mas nervioso.

Apenas lograba incorporarse de nuevo cuando una patada por atrás de la nuca lo volvió a tirar contra el suelo. Esta vez trataba de Haruka, seguida de Raiton y Kyousuke que al fin lograron alcanzarlo gracias a la ayuda de un desconocido. Se volvieron a colocar en posición para rodearlo y vieron a Mandoliel que parecía un gran guardián.

-¿Quién eres tu? –preguntó Kyousuke de inmediato.

-Un simple aliado que vino en ayuda de sus nuevos amigos –respondió Mandoliel.

-¿Otro de tus raros amigos Raiton? –le dijo Haruka a Raiton.

-¡Cállate! ¡Humana de pacotilla! –respondió furioso Raiton.

-¡Tu también eres un humano, imbecil!

-A la hora que se ponen a pelear ustedes dos…parecen niños de cinco años –dijo Kyousuke acostumbrado a las infantiles y diarias peleas entre Haruka y Raiton.

-¿Niños? ¡¡Pero el empezó!!

-¿Niños? ¡¡Pero ella empezó!!

-Te compadezco hermano –dijo Kaiba cansado de los gritos.

-A veces me pregunto porque la vida me castiga asi…Retornando al tema, la ayuda es bienvenida, gracias por detener a este loco –le dijo Kyousuke a Mandoliel aliviado de no tener que seguir persiguiéndolo – ¡Haruka! ¡El análisis!

-Ya lo tengo, es fácil, fue un exorcismo inverso…el tipo que haya “liberado” a este demonio simplemente manipuló el sello de tal manera que los papeles hayan cambiado y el demonio tomara posesión del cuerpo, simplemente se necesita una renovación de sellos –explicó Haruka.

-Bien, ¿Y que necesitas?

-Ayuda del demonio, asi que tendremos que obligarlo…

-Me parece bien por mi, tenia pensado hacer eso desde un principio.

-¿Cuatro contra uno? ¿No creen que es un poco…injusto? –se quejó Kaiba.

Al decir esto Kaiba se lleno de un aura de llamas negras que alejó a aquellos que le rodeaban, sus brazos óseos se llenaban de estas llamas y su mirada se volvió serena y a la vez llena de locura…una expresión genial para cualquier persona pero peligrosa para aquellos que se encontraban presentes.

-Empecemos…

Capitulo 79 Huyendo.

Capitulo 79 Huyendo.

Todos estos recuerdos anteriores pasaban por alguna razón en la cabeza de Kyousuke, quien saltaba de rama en rama, persiguiendo a Kaiba junto a Haruka, que ya se había recuperado por completo y Raiton que se encontraba en la retaguardia. Volvieron tras la pista de Kaiba nuevamente estando muy cerca…de igual manera, Kaiba sabia que se encontraban a poca distancia para dar con él por lo que también corría a toda velocidad mientras pensaba como volver a perderlos.

Kyousuke podía ver a Kaiba a la lejanía, con un gesto avisó a los demás apresurando el paso. Haruka ya tenia preparadas sus armas con cadenas, al igual que Kyousuke preparaba sus ojos demoníacos. Se acercaban cada vez más y más, la velocidad de los perseguidores era mayor que la de aquel que huia. El dolor de ojos y pecho de Kaiba surgió nuevamente…algo que hizo que alentara el paso todavía aun más.

-¡Raiton! ¡Ahora! –exclamó Kyousuke.

A la orden, Raiton invocó una bestia alada de raro aspecto y de mediana estatura, el demonio invocado fue volando rápidamente contra Kaiba y momentos antes de ser alcanzado, Kyousuke invocaba varias sombras que acompañaron y se unieron al alado demonio que se acercaba velozmente hacia el perseguido. Las sombras parecían tener mente propia y comenzó a actuar de inmediato, se alargaron y estiraron hasta alcanzar el tobillo de Kaiba, lo lanzo hacia arriba sin soltarlo y lo arremetió contra el suelo de manera violenta, deteniéndolo en seco por completo. Esta maniobra fue planeada por Raiton y Kyousuke cuando Haruka había enfermado…debido al tiempo libre que tenían planearon varias maniobras para detener o frenar a Kaiba, la cual una dio resultado exitoso.

Al momento instantáneo de la caída, Kyousuke y Raiton, que iban un poco mas adelantados que Haruka, intentaron rodear a su presa quien apenas estaba incorporándose sobre sus pies…después de un cruce de miradas, Kaiba hizo un muy ágil movimiento y logró evadirlos por un ligero agujero que habían descuidado, sin embargo Haruka lo pateó tan fuerte que lo lanzo varios metros de vuelta…rodeándolo esta vez por completo entre los tres y terminando la persecución.

-Hasta que al fin pudieron atraparme –dijo Kaiba resignándose a su captura.

-Somos tres, era algo vergonzoso que no lo hiciéramos –respondió Raiton.

Haruka veía fijamente a Kaiba…podía notar la lagrima de sangre que corría por su ojo derecho y también notaba la expresión de resistencia que tenia Kaiba a causa de su dolor pero tenia que aparentar fuerte…pero algo mas le llamaba la atención.

-¡¡Rayos!! ¡Es-esta guapísimo! –exclamó Haruka de inmediato y un poco sonrojada.

-¿¡Huh!?

-Quiero decir ejem– ¡esta clarísimo! ¡Esta clarísimo que este tipo es Kaiba! –respondió nuevamente Haruka nerviosa y aliviada de que nadie la haya escuchado.

-Lo mismo va para ti, nena –le respondió Kaiba con un guiño.

-¡¡Mierda!! –pensó para si Haruka.

-Ejem– como iba a decir, parece que tus ojos evolucionan cada vez mas con el pesar del tiempo –interrumpía Kyousuke que había mantenido el silencio en toda la conversación.

-Ya ves, el chico es prometedor…

-Eso parece…

Últimamente los ojos de Kaiba (y Kai en su defecto) dolían, ardían y lloraban sangre mas frecuentemente, empezaba a hacerse costumbre y aun asi no lograban acostumbrarse el dolor, ya que este era en verdad insoportable…pero eso no parecía importarles, nadie le tomaba mucha importancia a ello por lo que nadie se hacia la pregunta del porque eso estaba sucediendo.

-Devuelve ese cuerpo –dijo Raiton.

-Tendrás que quitármelo matarile rile ron –dijo Kaiba con tono musical.

-¿Qué crees que teníamos planeado hacer? –dijo Kyousuke con sus ojos cerrados y una sonrisa de astucia.

De repente, de la espalda de Kaiba salieron numerosos brazos delgados y negros que se movían tan descontroladamente como gusanos sin cabeza. El grupo de los tres, Kyousuke, Raiton y Haruka se alejaron un poco en defensa propia, los brazos empezaban a cubrir y esconder a su poseedor por lo que tenían que actuar rápido. Dos de los brazos tomaron una pierna y un brazo de Haruka y la empezó a alejar, otros cuatro intentaron hacer lo mismo con los dos hombres restantes pero fracasaron por completo siendo cortados por sus respectivas armas, en ese minuto de distracción, Kaiba estaba ya por los aires después de un salto con mucho impulso departe de sus múltiples brazos…detrás de el empezó a formarse una gran concentración de sombras que tapaba ligeramente la luz del sol, esta gran concentración de sombras se movía sola al frente de Kaiba y con sus manos este los puso como un tipo de bloqueo a sus perseguidores, se paro sobre las sombras que no parecían ser para nada sólidas, y salto nuevamente lejos…volviendo a ganar terreno y logrando otro escape exitoso.

-¡Ja, ja, ja, ja estupidos! –se burlaba Kaiba mientras se alejaba.

La caída era larga, el impulso de antes lo había elevado mas por lo que tenia una larga trayectoria por los aires…después de tres minutos de libre vuelo temporal, piso tierra firme y corrió lo mas rápido que podía, ya que sus ojos y dolor intenso de pecho le eran un obstáculo para aumentar su velocidad, pero tenia confianza en el gran muro de sombras que iba atrasarlos por lo menos unos diez minutos.

Kaiba corría con satisfacción de que no iba a poder ser atrapado, a pesar de que se encontró muy nervioso esta ultima vez, por un minuto pensaba que tenia que luchar contra tres al mismo tiempo, pero por fortuna para el logro una maniobra y un escape grandioso y sin ningún fallo. Pensaba todo esto hasta que sucedió…

La tierra empezó a destruirse formando una gruesa línea, Kaiba retrocedió de un salto para asegurarse de que no era un ataque…efectivamente, un tipo caminaba lentamente saliendo de varios arbustos con una katana guardada en su funda…daba pasos lentos y pacientes, mientras miraba fijamente a Kaiba.

-De esta línea de aquí, no permitiré que cruces –dijo el misterioso hombre.

-¿Quién demonios eres tu?

Capitulo 78 Mirada al pasado (Parte 2)

Capitulo 78 Mirada al pasado (Parte 2)

Kyousuke caminaba lentamente hacia la puerta que su hermano había cruzado para adelantarse, a pesar de la victoria contra Tohara empezaba a sufrir las consecuencias de la batalla, y el golpe que las mascaras le habían propinado en la espalda lo dejaron débil y herido de gravedad. Ya estando a diez metros de la puerta, cayó de rodillas y vomito sangre, al final choco contra el suelo quedando totalmente debilitado para la batalla.

-Tienes que aguantar mas de lo esperado…Kaiba –pensaba Kyousuke

Mientras tanto, Kaiba corría por un pasillo de escaleras que llevaba hacia un túnel abajo del gran salón principal de donde provenía. El pasillo parecía no tener fin hasta que pudo divisar a la distancia una simple puerta, la cual se podía suponer que era la entrada hacia otro gran salón. Efectivamente, al llegar Kaiba al lugar y abrir la puerta se encontró con una especie de cueva en la que había miles de condenados a sufrir por la eternidad en grandes paredes de llamas ardientes. En medio de todos los desgraciados que pedían ayuda desesperadamente, estaba una bestia de color negro y ojos blancos y saltones por todo su cuerpo, tenia cientos de brazos similares a tentáculos en sus costados y en la espalda, en su cara tenia una sonrisa desquiciada con tres ojos, que eran grandes y blancos, y en el centro de estos últimos se podían apreciar los ojos de demonio habituales que ya conocemos.

-Asi que has liberado tu verdadera forma –dijo Kaiba al ver la bestia.

-¡¡Es una blasfemia para los demonios tomar formas humanas!! ¡¡Debemos ser como somos en realidad, y no aparentar ser unos seres tan repugnantes y falsos!! –respondía la bestia con una voz aterradora y maniática.

-Adoptamos esa forma para comprimir nuestra fuerza y mezclarnos entre ellos…ciertamente nosotros también somos falsos.

-¡Somos demonios después de todo! ¡JA, JA, JA, JA! –gritaba a carcajadas el monstruo negro.

-Por ordenes de Lucy-sama…Yozo el cuarto heredero, acusado de traición al trono, debes ser ejecutado ahora mismo –dijo Kaiba empuñando su guadaña de sombras.

-¡¡JA, JA, JA, JA, JA, JA, JA, JA!! –gritaba Yozo lleno de locura en su maquiavélica risa.

Los brazos que estaban en los costados de Yozo se extendieron y alargaron atacando a un Kaiba que no había terminado de invocar sus armas por completo y se vio obligado a pegar varios saltos para esquivar, los ataques fallidos atravesaban los cuerpos de los condenados presentes y por alguna extraña razón los hacia explotar empezando un espectáculo de sangre, entrañas y miembros destrozados por todos lados.

-Debo tener mucha precaución, su poder es tan inmenso provocando que todo aquel que llegue a tener contacto con el sea destruido al instante, obviamente a los seres débiles, aun asi no se que efecto surgiría en mí…en un combate cuerpo a cuerpo él tiene todas las de ganar, asi que debo encontrar alguna manera de derrotarlo –pensaba Kaiba mientras esquivaba los numerosos ataques de los brazos de Yozo.

La sangre de los condenados seguía esparciéndose como si tratara de una bomba de confeti, las llamas quemaban los miembros al instante incluyendo a las entrañas…La bestia atacaba a Kaiba sin dar tregua, riendo a carcajadas y dando a notar su gran y muy avanzada locura.

La razón por la que Yozo había sido condenado a muerte por el delito de traición era sencilla…en esa época empezó a afectar una plaga tanto a demonios como humanos afectando mucho su salud mental…se le dio el nombre de “Locura”. La “Locura” afectaba a todo ser vivo, despertaba desde su mas bajos instintos y deseos al punto de enloquecer, muchos entraban en un trance masoquista y varios demonios comenzaban a hacerse adictos a la sangre pecadora, esta plaga llegó a afectar al cuarto heredero Yozo, que era fuerte pero aun asi la plaga fue mas fuerte…afectándolo gravemente haciendo que se revelara contra el reino supremo de Lucyfer e intentara asesinarla…despertando su mayor anhelo. Sin embargo, su intento de asesinato fue todo un fracaso ya que intervinieron los tres sirvientes de la corona…Kaiba, Kyousuke y Tohara. Este último fue mordido en la batalla por Yozo y asi fue como la “Locura” le fue infectada…aunque no era tan grave era lo suficiente para rebelarse contra sus hermanos y la corona.

Retomando la batalla, Kaiba comenzaba a bañarse en sangre y tripas de los condenados presentes, ningún ataque de Yozo lo había podido alcanzar a pesar de la cantidad de brazos que atacaban. “Hora de acabar con esto…ya no mas mariconadas, te derrotare en este instante”, dijo Yozo mientras tomaba uno de los cuerpos de un condenado y tomaba su sangre que caía de la cabeza decapitada de la victima. “No tengo otra opción…debo recurrir a ello”, pensó Kaiba al ver que su oponente empezaba a acercarse.

Los ojos en el cuerpo de Yozo se movían de una forma repugnante, veía hacia todos lados como si buscaran algo desesperadamente…Yozo aspiraba un aire de terror con solo mirarlo, sin embargo, Kaiba tomaba el valor para acercársele ¡, sabiendo muy bien que era el cuarto heredero…un ser muy poderoso. Asi fue como se le ocurrió una idea para poder derrotarlo, aprovechando el festival de sangre que había a su alrededor, tomo su guadaña y cubrió la hoja con sangre, al punto que se derramaba en gotas. Los brazos en la espalda de Yozo atacaron todos a la misma vez, Kaiba los esquivo corriendo directamente contra su contrincante, sus movimientos eran rápidos, mas de lo que Yozo esperaba.

Kaiba se movía en raras direcciones, no se dirigía al ataque directo y ni siquiera intentaba esquivar…simplemente corría y cambiaba de dirección a cada instante. Al cabo de varias vueltas, Kaiba se detuvo en el mismo punto donde había comenzado jadeando y muy nervioso. Yozo solo lo miraba con gozo, sabia que ahora su pequeño oponente estaba agotado por lo que iba a ser una presa fácil…caminaba lentamente hacia Kaiba, con una sonrisa de oreja a oreja (aunque no tenia, era solo una expresión), Kaiba no se movía de su lugar y estaba listo para la defensa…al momento en el que Yozo dio un paso todo el suelo empezó a brillar de un rojo carmesí.

-¡¡¿¿Qué rayos??!! –gritaba grotescamente Yozo mientras miraba el suelo y se daba cuenta que por alguna razón no podía escapar.

-…Espíritu santi…amen –se escuchaba Kaiba que hacia un rezo en lo que su enemigo se acercaba.

-¿Qu-que mierdas me estas haciendo?

-No puedo ser capaz de derrotarte en un combate cuerpo a cuerpo…asi que no te asesinaré, tomare tu alma y la sellare junto a la mía… –respondió Kaiba mientras su cuerpo también empezaba a brillar.

-¡¡Estas loco!! ¡¡Yo estoy infectado con la “Locura”!! ¡¿Sabes lo que puede suceder al fusionar mi alma, que esta en su verdadera forma y llena de locura?! –exclamó Yozo sin quitar la sonrisa de su cara.

-Puedo morir…pero vale la pena el intento.

Yozo empezaba a desvanecerse y formarse en una masa energética de color azul, se mezclo con el sello que estaba bajo sus pies y el sello empezó a adentrarse en el cuerpo de Kaiba, este ultimo tenia movimientos extraños, tipo ataques de epilepsia mientras el demonio era insertado en su cuerpo…ya terminado el ritual que no tuvo mucha duración…Kaiba sentía como la “Locura” afectaba su mente y cuerpo, tenia unas ganas frenéticas de asesinar y de reírse a carcajadas, cosa que hizo…reía y reía tan fuerte que los condenados presentes estaban aun mas aterrados…

Kyousuke llegó a la escena y se encontró con un Kaiba totalmente diferente, tenia muchos brazos en su espalda y reía locamente. Miró a su alrededor y pudo entender que Kaiba había sido el ganador…se preguntaba como, pero tenia una preocupación aun mayor.

-Hermano… ¿acaso fuiste infectado de la plaga? –preguntaba Kyousuke.

-¿Infectado?...te equivocas…la locura es la mejor forma de estar cuerdo –respondió Kaiba.

-Espero…que no me toque asesinarte a ti también.

Capitulo 77 Mirada al pasado. (Parte 1)

Capitulo 77 Mirada al pasado. (Parte 1)

En lo que parecía ser una de las millones de salas que tenia el inframundo, Kaiba y Kyousuke corrían juntos por una escalera que llevaba a una gran habitación de grandes puertas. Ambos jadeaban y Kaiba parecía tener un aspecto y semblante todavía mucho más serio de lo que es actualmente. Llegaron a las gigantescas puertas y las abrieron con mucha prisa, el salón estaba vacío y oscuro, con muchos pilares que sostenían la infraestructura, hasta que una figura dejo verse.

-Asi que te dejas ver…Tohara –dijo Kaiba seriamente.

-Hermano Kyousuke, hermano Kaiba, los estuve esperando –respondió el demonio.

-Ya déjate de payasadas y dinos donde esta Yozo –dijo Kyousuke.

-¡No seas idiota! Bien sabes que no puedes derrotar al gran Yozo-sama –respondió Tohara con gran rudeza.

-Has caido tan bajo…no queremos hacerte daño asi que es mejor que nos digas donde esta ¡Son ordenes de Lucy-sama! –reclamaba Kyousuke.

-Es inútil, esa información no saldrá de mí.

Kaiba pudo notar una puerta escondida al fondo del salón e inmediatamente supo que el demonio Yozo, al que estaban buscando, debía encontrarse más allá de esa puerta. Llamó la atención de Kyousuke y con un gesto le señaló el lugar.

-Déjame ir…tu quédate aquí y encárgate de Tohara –dijo Kaiba.

-¡¿Estas loco?! –Exclamó Kyousuke –Ese tipo es muy fuerte ¡te hará pedazos!

-Puede ser el cuarto heredero…pero Lucy-sama nos confió esta misión por lo que no debe ser tan fuerte.

-Pero porque ella cree en la probabilidad de que nosotros dos juntos podamos derrotarlo.

-Pero ya ves que Tohara no nos permitirá pasar y no nos dirá la ubicación de Yozo, ¡Confía en mí! –le dijo Kaiba tomándole del cuello ligeramente.

-Bien…yo me encargare de Tohara, u ve y mantén a Yozo hasta que yo llegue ¿entendido?

-Si.

A las espaldas de Kyousuke comenzó a formarse una gran ola de sombras, con la cual Kaiba empezó a confundirse. Aunque parecía más bien un ataque (y asi fue como Tohara lo vio) las sombras inundaron por completo el salón y Tohara se vio obligado a nadar en sombras. Las sombras tomaban un aspecto siniestro e intentaban morder a la victima del ataque, pero la audacia fue más y Tohara no permitió que fuera devorado por unas simples olas negras.

-Necesitaras más que eso y lo sabes –dijo Tohara.

-No quiero lastimar a mi hermanos…eso es todo –respondió Kyousuke que flotaba en el mar de sombras.

-¡¡Estupido!!

Tohara salio inmediatamente del mar de sombras e invoco a una gran bestia halada, con su ayuda se fue al ataque directo de Kyousuke quien simplemente se sumergió para esquivar el ataque. Mientras todo esto sucedía, Kaiba abrió la puerta y logro huir sin que su hermano que se había revelado se diera cuenta.

-Debo apresurarme, exterminar a ese monstruo –pensaba Kaiba.

El mar de sombras había desaparecido y Tohara empezaba a invocar seis mascaras de extraño aspecto. Las mascaras flotaban alrededor de Tohara, tomando a este como el eje, Kyousuke solo lo miraba mientras dos guadañas se formaban en cada brazo.

-Si no eres capaz de dañarme, ¿Cómo crees que podrás derrotarme? –decía Tohara mientras movía sus manos para que sus mascaras continuaran en movimiento.

-Encontrare alguna manera de hacerlo…si no tendré que verme obligado a matarte, aunque no quiera –respondió Kyousuke.

-Suena como una buena idea…excepto que no podrás derrotarme.

Tohara tomo una de las mascaras que flotaban a su alrededor y se la puso, inmediatamente las mascaras se voltearon y lanzaron varios rayos contra Kyousuke, quien simplemente los esquivo. El enmascarado demonio apareció detrás de su enemigo y le propino una muy fuerte patada que lo arrojo varios metros y destruyo tres pilares. Kyousuke apenas se levantaba cuando un puñetazo lo volvió a mandar lejos y destruyendo otro pilar, esta vez mas prevenido, Kyousuke se revolcó en la tierra evitando el próximo golpe de Tohara, quien golpeó fuertemente el suelo logrando varios destrozos.

Kyousuke debía actuar rápido, tomo un pequeño impulso y se abalanzó de manera brutal contra su enemigo, lo golpeó con el cuerpo haciéndole perder el equilibrio y después le devolvió la patada, instantáneamente, cuando Tohara iba a volar por los aires, Kyousuke le agarro la pierna derecha y le dio varias vueltas, después de marearlo un poco lo tiro contra la pared y no cesaba el ataque. Invocó varias concentraciones de sombras y las lanzo contra Tohara que estaba en medio de la gran pared destrozada, el ataque fue todo un éxito dejando mal herido a Tohara.

-¡Mierda! Admito que eres hábil…

-¿Acaso no recuerdas que soy el mas fuerte entre los tres? –dijo Kyousuke mientras se le acercaba con paso lento.

-Quizás lo recuerde…pero me niego a aceptarlo.

Las mascaras que flotaban realizaron el contra-ataque, Kyousuke las había olvidado por completo por lo que no llegó a predecir lo que sucedía; las cinco mascaras que volaban se habían unido en una sola y reunieron la suficiente energía para soltarla toda de un solo golpe y terminar con Kyousuke, este simplemente seguía caminando hacia su contrincante sin ser consciente de la gravedad del asunto. Las mascaras fijaron el objetivo y procedieron a disparar. Para cuando el objetivo se percató del peligro era demasiado tarde…el disparo impacto la espalda de Kyousuke haciendo que el lugar explotara ligeramente.

Tohara veía el éxito de su ataque, pensaba en su victoria contra el mas poderoso entre los tres hermanos, al mismo tiempo pensó sobre donde se encontraba Kaiba, y recordó que se había olvidado completamente de el. Se detuvo por un raro sonido y empezó a mover la cabeza hacia todos lados intentando de descubrir que fue lo que había provocado el ruido, al instante pudo notar como las cinco mascaras fusionadas habían sido partidas por la mitad y Kyousuke volaba por los aires con su guadaña en mano al ataque de Tohara. Era muy tarde para cuando se dio cuenta del ataque y no se le ocurrió nada para poder detenerlo. Al final, Kyousuke partió a su hermano en dos, derramando sangre por todos lados y las dos partes restantes del cuerpo se movían epilépticamente.

-Eres un idiota…hermano –dijo Kyousuke con lágrimas en los ojos.

Capitulo 76 Sueño.

Capitulo 76 Sueño.

Yukiro y Yui se miraban con una sonrisa de astucia, ambas esperaban ansiosas el próximo encuentro que iban a tener…porque estaban seguras de que se iban a encontrar de nuevo. Ishiiro y compañía se retiraron dejando a una herida Yui, una muy agotada Miory, y un ileso Tonnosuke solos…

-Es hora de que nosotros también nos vayamos –dijo Miory.

-Tienes razón…aunque Yui esta lo suficientemente herida para movilizarse rápido, y tu has usado mucha energía, apenas puedes mantenerte en pie…tendremos que irnos en un transporte –respondió Tonnosuke.

-Entonces…andando, invoca algo.

Tonnosuke hizo varios sellos y golpeó el suelo, apareció mucho humo junto a la invocación…al cabo de unos segundos apareció la bestia. La invocación tenía mas pinta de animal que de bestia, era una vaca algo extraña, de color morado fuerte y tenía unas alas muy curiosas, sus ojos eran rosados (por más daltónico que parezca) y tenia manchas amarillas.

-¿Q-q-q-q-q-que…d-demonios es eso? –preguntaba Miory con un tic en el ojo.

-Parece…. ¿una vaca? –dijo Yui dudando de la salud mental de su entrenador y hermano mayor.

-¡Es Fogueti Petruquia! ¡No sean tan groseras! –se defendió Tonnosuke.

-…

-…

-En fin…no hay tiempo que perder ¡apresurémonos!

Las hermanas se montaron en la cómoda vaca (si…era cómoda) y se sujetaron lo más fuerte que pudieron, Tonnosuke las siguió y comenzó a arrear a la vaca.

-Definitivamente ustedes están locas…¡¡arre Petruquia!!

Sin duda…las hermanas dudaban mucho sobre la salud mental y seriedad de su hermano mayor, que no parecía en lo absoluto un demonio…y menos que sea el tercer heredero. La vaca empezó a volar por los aires en un viaje muy rápido…la segunda fase de su entrenamiento ya estaba terminado.

Pasaron tres días desde esa última batalla…

En otra parte, Haruka, Raiton y Kyousuke seguían en su campamento. Pasaron tres días desde que perdieron la pista de Kaiba pero hubo un impedimento muy grave…la exorcista sufría de una grave enfermedad, que era desconocida…por lo que tenia que reposar hasta que estuviera totalmente recuperada. Aunque bien, de seguro Kaiba ya les llevaba una muy grande ventaja en cuanto a distancia…no se iban a rendir y apenas Haruka se recuperara, ellos iban a retomar la búsqueda y persecución.

Raiton salió de la tienda de campaña donde estaba Haruka para tener una pequeña charla con Kyousuke, que se encontraba mirando las estrellas de la planicie.

-¿Kyousuke?

-¿Qué quieres?

-Quería hablar contigo…es sobre Kaiba –dijo Raiton colocándose junto a Kyousuke.

-¿Qué es?

-Si quieres…puedes continuar sin nosotros.

-¿Qué dices? –Preguntó Kyousuke sorprendido –No lo pienso hacer…

-¿Qué? ¿Por qué? Eres un muy fuerte demonio…puedes trabajar por tu cuenta.

-Si pero… –Kyousuke comenzó a ruborizarse –Estoy, algo preocupado.

-¿Preocupado? ¿Por Haruka?

-Em, bueno no…no espera, si…que digo, ¡no! Es solo que…ella es una parte esencial para el exorcismo, obviamente yo la voy a ocupar en un futuro –dijo Kyousuke nervioso.

-Oh, asi que es eso…bueno, que conste.

-No te preocupes…yo sé lo que estoy haciendo.

Pasaron cinco días desde la última batalla…

Se puede apreciar un ambiente caótico…el cielo era negro combinado con rojo, había llamas y caos alrededor…Kaiba se veía en un ambiente muy extraño. Miraba a su alrededor y podía ver toda la desesperación y el caos que se había producido, miró hacia el cielo y pudo notar como la luna se acercaba cada vez mas y mas, escucho alguien que le llamaba…volteó su mirada y pudo ver la figura de una mujer, esta mujer sostenía dos grandes armas, de diseño exagerado…pero no podía ver bien su rostro, intentó varias veces el poder verle la cara pero no podía, hasta que ella pasó al ataque.

Kaiba obviamente se defendió, con dos guadañas invocadas…hasta que hubo una interrupción, sus ojos…el dolor de sus ojos retornó e hizo que Kaiba se arrodillara, frustrado alzó su rostro para ver a la mujer, que estaba a punto de degollarlo…pero de un grito desapareció. Siguió mirando al cielo y notaba tres jinetes…de aspecto aterrador, también podía ver sujetos con túnica blanca luchando contra unos monstruos horrorizantes, tenían la forma de un feto en el vientre de su madre, con unas alas tan asquerosas y sostenían lanzas…Kaiba comenzó a sentir el miedo en su máxima expresión…pero no se preguntaba donde estaba, ni que estaba haciendo allí, ni como llego…se preguntaba ¿Qué sucede?

Kaiba abrió los ojos…al ver a su alrededor supo inmediatamente que todo fue un sueño...mas bien una pesadilla, pero el dolor en sus ojos era real, volvió a llorar sangre, pero comenzaba a acostumbrarse al dolor por lo que podía caminar, aun asi era insoportable y no lograba ver bien. Pasados varios minutos, el dolor desapareció lentamente dejando tomar a Kaiba un respiro…vio un pequeño riachuelo que pasaba cerca de el y fue inmediatamente a hidratarse.

-¿A que viene ese sueño? –Pensaba –Era completamente extraño… ¿Cuánto tiempo ha pasado desde que caí inconsciente?

Después de tomar varios tragos de agua y lavar su cara, el estomago le advirtió que llevaba días sin comer, buscó algún árbol que tuviera frutos, pero no había ninguno…hasta que pasó un conejo frente a el. Una hora después, al haberse comido al conejo (todo), Kaiba se sentó a relajarse un poco…

-Espera…llevo mucho tiempo inconsciente…¡¡Mierda!!

Capitulo 75 El arma definitiva.

Capitulo 75 El arma definitiva.

Yukiro guardaba su espada celtica para esta vez invocar la espada definitiva. El arma que la llevaría a la victoria de una vez por todas…juntó ambas manos y una luz verde comenzó a rodearla, en sus manos se comenzaba a formar esa espada…de gran tamaño y bello diseño, al principio era una simple luz verde con forma de espada, hasta que llegó a materializarse por completo dando por terminada la invocación.

-Y con esto subiré al último nivel… ¿estas lista? –dijo Yukiro

-Claro, siempre lista –respondió Yui.

-Me gusta la actitud…

Yui tomó el mango de su espada muy fuerte, tenia un poco de miedo de lo que podía suceder en los próximos minutos…Yukiro no se movía de su lugar, ni un solo paso. Al cabo de un momento de silencio, Yui solo logró ver un paso de su enemiga, solo un paso…pudo sentir un aire pasar a su lado mientras quedaba en shock. La pierna derecha, el hombro derecho, y la mejilla derecha, estas fueron rozadas de un corte por lo que comenzaron a sangrar ligeramente…Yui no podía creérselo, no pudo distinguir ni siquiera un movimiento, no pudo seguirla con los ojos…solo pudo sentir el momento del impacto.

-Absolutamente todo en mí aumenta a su nivel máximo con esta espada…La espada demoníaca “Reaper” –explicaba Yukiro

-Imposible…no puede ser posible.

-Fue una buena batalla…lastima que hasta aquí termina.

Volteándose y atacando, Yui se vio presionada a alejar a Yukiro de su espalda para poder pensar en algo rápido, su ataque fue tan veloz…esa velocidad era anormal, no cualquiera podía tenerla, debía encontrar la manera de poder derrotarla. Yukiro esquivo el swing del ataque dando varias piruetas…apuntó al pecho para su próximo ataque, tenia que terminarlo pronto.

Yukiro procedió al ataque, Yui pudo notar dos pasos…solo dos pasos. En un instante, la gran espada de Yukiro se veía clavada en el hombro izquierdo de Yui, quien se encontraba perpleja. “-Si no hubiera podido ver ese segundo paso….no me hubiera dado tiempo de esquivarlo, y me hubiera dado en el corazón”, pensaba Yui mientras observaba como su hombro izquierdo era atravesado…Yukiro también se sorprendió al ver que Yui pudo esquivar su ataque justo a tiempo, pero no lo suficiente. Sacó su espada del cuerpo de Yui y se volvió a alejar.

-¡Sorprendente! Fuiste capaz de esquivar mi ataque…aunque no lo suficiente.

-M-maldita.

-Créeme, eres la primera persona en lograr esquivar un ataque tan directo proveniente de “Reaper”, deberías estar orgullosa –dijo Yukiro cerrando sus ojos y colocando una sonrisa en su cara.

El hombro de Yui sangraba muy fluidamente, Yui se vio en problemas, tenia que terminar con esta batalla rápidamente, aunque fuera una huida…sabia que las condiciones se ponían en su contra y debía hacer algo justo ahora o moriría.

Blandió su espada, que se encontraba totalmente cubierta por una capa de hielo, la movió en el aire lanzando una gigante onda de llamas frías. Yukiro se movió de inmediato saltando bien alto, Yui no cesaba su ataque y continuaba lanzando ondas de llamas frías contra su contrincante; Yukiro que estaba suspendida en el aire, esquivaba algunas ondas mientras otras las partía en dos con su espada. Finalmente cayó en el suelo pero las ondas no paraban, se veía en la obligación de seguir esquivando los ataques continuos de Yui.

En el segundo que los ataques dieron una pausa, Yukiro alzó su mirada hacia Yui, que apuntaba su espada al suelo…enterrando su espada en el suelo, Yui provocó una gran explosion de hielo, que se esparcía hacia todas direcciones, el ataque era un perfecto circulo que congelaba todo a su paso. Yukiro tuvo que retroceder mientras todo a su alrededor pasaba a congelarse…el ataque finalmente termino, dejando a Yukiro mal herida y con mucho frío.

-Esta niña…a pesar de su herida me ha atacado tan ferozmente que me ha dejado con heridas graves, no quería hacerlo pero no me deja otra opción—pensó Yukiro mientras se ponía en pie.

Yukiro adoptó una posición extraña, todas las espadas que cargaba en su espalda cayeron al suelo, empezó a susurrar un rezo y un círculo verde en forma de sello se formaba en su pequeño perímetro. Mientras tanto, Yui la observaba mientras tomaba aire, los continuos ataques la dejaron aun más agotada y necesitaba aire, lo peor de todo es que sabia que fuera lo que fuera que Yukiro estuviera haciendo, sabia que no era para nada bueno.

-Hora de acabar con esto niña…fue un gusto luchar contigo –dijo Yukiro.

Las espadas tiradas en el suelo empezaron a elevarse y flotar por si solas, se colocaron firmemente y se colocaron en un circulo totalmente perfecto, paralelas al sello bajo los pies de Yukiro.

-Melod—

-¡¡Yukiro!! –Interrumpió Ishiiro con una forma totalmente diferente, esta vez era más delgado y sus brazos igual, tenía un aspecto aun más apuesto, tanto que Yui casi ni lo reconoció – ¡Detente! Es hora de terminar esta batalla.

-¿Qué? ¡Estaba a punto de asesinarla! ¿Cómo osas a interrumpirme? –renegó Yukiro.

-Debemos retirarnos…estamos metiéndonos en serios problemas.

Yukiro observó que su compañero cargaba a Ishiiro en sus hombros, parecía estar inconsciente, además, ella también sabía que Ishiiro sabía hacer las cosas bien, y sabía muy bien cuando retirarse y cuando no, asi que hizo caso a sus palabras y las armas que flotaban cayeron de nuevo.

-¡Rayos! De veras que este tipo se mueve muy rápido –dijo Tonnosuke mientras ayudaba a Miory a caminar.

-¿Miory? ¿Tonnosuke? –Dijo Yui que no lograba entender nada – ¡Están bien!

-Debemos retirarnos Yukiro…ese tipo con el que me enfrentaba, es mas peligroso de lo que aparenta –le explicaba Ishiiro a Yukiro que recogía sus espadas.

-Espero que tengas razón –dijo Yukiro – ¡Oye niña! –Apuntó a Yui –Terminaremos esta batalla la próxima que nos veamos…asi que prepárate hasta ese entonces.

-Estaré esperando.

Capitulo 74 Subiendo niveles.

Capitulo 74 Subiendo niveles.

Después de varios minutos de atacar con la misma espada, Yukiro decidió que era hora de subir el nivel. Guardando su “hacha” e intercambiándola por una espada estilo samurai, la batalla comenzaba a intensificarse...

-¿Fuiste samurai también? Lo bueno es que esa técnica de esgrima es mi fuerte –dijo Yui.

-En efecto, tu técnica es la de un samurai, y debo admitir que no esta para nada mal…sin embargo….

-¿Sin embar—

Yui fui interrumpida por el ataque de Yukiro, quedó completamente perpleja, su velocidad fue tan increíble que no podía creérselo aun. Si no la hubiera visto a tiempo, hubiera podido cortarle la cabeza sin chistar. Yui supo que tenía que dejar las charlas a un lado y concentrarse aun más en la batalla.

-Si no hubiera visto su pie moverse en dirección de ataque…hubiera muerto –pensaba Yui perpleja aun.

-¿Y bien? El nivel aumentado esta vez es considerable comparado al anterior.

Yui no contestó; al contrario, atacó rápidamente haciendo que ambas armas chocaran fuertemente ente sí. Yui con su agilidad para moverse, empezaba a atacar con sus movimientos tan hábiles, mientras el frío aumentaba y la katana de Yui experimentaba un congelamiento parcial. Por otra parte, Yukiro observaba con atención a los ataques de Yui, esta vez fue su iniciativa (ya que en toda la batalla Yui solo había estado en defensa), por lo que estaba muy interesada.

Ambas retrocedieron, se apoyaron en las rocas que estaban a sus espaldas, tomaron impulso y volvieron al ataque, esta vez de parte de ambas. Los sonidos de los choques entre ambas katanas era cada vez mas fuerte, haciendo que las ondas comenzaran a hacer desastres y romper todo a su alrededor. Yui y Yukiro luchaban ferozmente, ambas con su agilidad y habilidad, se movían extravagantemente y atacaban tan violentamente…En un movimiento, Yukiro apuntó al pecho de su enemiga, pero Yui en reacción, hizo un salto único, daba vueltas sobre su eje de la cabeza en el aire mientras brincaba de un lado a otro por sobre la cabeza de Yukiro. Fue un movimiento maravilloso pero eso no importaba, lo importante era derrotar a tu enemiga por lo que atacó las espaldas de Yukiro en el momento justo que tocaba tierra firme, Yukiro se defendió perfectamente haciendo caer las esperanzas de Yui.

En otro movimiento, Yui intentaba cortar los pies de su contrincante, sin embargo, en el momento en que la katana quedó apuntando directamente hacia un lado, Yukiro saltó y se mantuvo de pie en la katana de Yui por varios segundos, la miró a los ojos con una mirada desafiante, al cual Yui respondió con otro ataque, esta vez el ataque tenia hielo sólido…

-¿Hielo? ¿Pero que demonios?

Moviendo su espada en varias ondas, las llamas frías características de Toyosaki (y obviamente de Yui) empezaban a dirigirse contra Yukiro, que seguía buscándole una explicación… Volvió en sí, Yukiro veía como las llamas se acercaban cada vez mas, reaccionó haciendo varios saltos, e intentó atravesar una de las llamas con su katana, lo que no fue un fracaso, sin embargo dejó varias heridas.

-¿Llamas frías? ¿Cómo es esto posible? –pensaba Yukiro, mientras consideraba la idea de subir el nivel.

-No te asustes…es parte de mi poder especial, por decirlo de esa manera –decía Yui mientras cargaba otro ataque.

-No hay duda alguna, esta chica es peligrosa.

Hubo otro intercambio de armas, esta vez Yukiro cambió su katana estilo samurai por una espada celtica medieval. La espada tenía un fino diseño y por varias partes estaba hecha de oro, una joya para un coleccionista. Yui se preparaba, analizando lo que estaba por venir, “Si la katana aumentó bastante su poder y agilidad…esta espada ha de subir su nivel aun mas”, pensaba Yui, mientras observaba como Yukiro se colocaba en posición de combate.

-Esta sería…la segunda espada mas fuerte –dijo Yukiro lista para atacar.

Yui no contestó, no quería perder la concentración pero ni en el mas mínimo detalle, observaba los movimientos de los pies de Yukiro, también su mirada y su velocidad, intentaba predecir donde iba a ser el ataque además de con que velocidad y fuerza… Yukiro dio un paso, no pasó nada, dio otro paso, tampoco sucedía nada…al tercer paso Yui se encontraba defendiendo su retaguardia, porque en efecto, el primer objetivo de Yukiro fue su espalda., un movimiento perspicaz, pero para su mala fortuna pudo ser leído a tiempo. Pasando al contra-ataque, Yui atacó con sus llamas frías de nuevo, Yukiro simplemente corría rápidamente en zigzag, logrando una evasión perfecta.

Del brazo izquierdo de Yukiro se podía notar una especia de proyección, mirándolo de cerca, parecía un escudo pegado al brazo. Yui no le daba mucha importancia, pero aun asi tenia que tener cuidado, podía ser un as bajo la manga. Yukiro volvió a atacar, Yui lo esquivo perfectamente y también atacó, la dicha proyección en el brazo izquierdo de su enemiga le sirvió como un sólido escudo al ataque de Yui, que iba con mucha fuerza pero fue totalmente bloqueado.

El agotamiento comenzaba a sentirse en ambas luchadoras…tantos movimientos ágiles y ataques tan fuertes agotaban a cualquiera, ambas pensaban en una forma rápida de acabar con esta batalla…lo cual a Yukiro le dio una idea.

Volvió a atacar pero el ataque fue esquivado, Yui observaba que ella no era la única que jadeaba, Yukiro también presentaba síntomas de cansancio por lo que sabia que tenia que detenerse por unos segundos, pero Yukiro era persistente…tenia que aprovechar que Yui se encontraba agotada, pero estaba echando a un lado un aspecto importante, ella también estaba agotada.

Yukiro supo que era la hora de sacar su as bajo la manga, la llave para su victoria, su espada mas poderosa y preciada…lo que lograría derrotar a Yui rápidamente y sin ninguna dificultad.

-Es hora…de subir al último nivel.

Capitulo 73 Eres oficialmente, mi enemiga.

Capitulo 73 Eres oficialmente, mi enemiga.

La figura que Zherk divisaba a lo lejos era pequeña por lo que sabia que en efecto era Miory sin duda alguna. No se movía y la pared de polvo comenzaba a desvanecerse más y más a cada momento.

-No cabe duda…de que esta arma nueva me queda como anillo al dedo.

Zherk, al escuchar estas palabras, cambió su semblante por una seria y con preocupación de lo que sucedía hasta que se escuchó un estallido. El estallido provino de Miory, quien libero toda su espíritu en un disparo único…dicho disparo fue velozmente directo contra el pecho de Zherk, un éxito, el disparo no falló.

-¡¡Ggggaaaaaaaaaaaahhhhhhhhh!! –gritaba Zherk mientras aguantaba con su escudo “capas de cebolla”.

El disparo seguía firme, no cesaba, al igual que Zherk, no se rendía y se negaba a retroceder terreno. Después de varios segundos de lucha, la capa de defensa de Zherk se quebró golpeando seriamente a Zherk en el pecho.

El estallido y el disparo desaparecieron, mientras que Zherk caía de rodillas ante su derrota. Miory se notaba sumamente agotada y se sentía falta de energías…después de todo empleó todo su espíritu en ese único disparo, ahora se sentía tan débil y sin fuerzas…sus ojos comenzaban a pesarle y supo que ya no podía mas, hasta ahí había llegado su limite.

-Gane…ha, eso es…lo que importa…

Por otra parte, Yui y Yukiro seguían corriendo mientras sus armas chocaban entre si, ambas no retrocedían ni un poco, sin embargo, se encontraban un poco agotadas, por lo que las dos decidieron detenerse y descansar un poco.

-Debo admitir…que eres hábil –dijo Yukiro jadeante.

-Lo mismo digo –respondió Yui con un poco de orgullo.

-¿Bromeas? Obviamente que soy hábil, he vivido todas las generaciones de espadachines que han existido.

-¿Qué?

-Soy una demonio…por lo que mi vida es muy larga a la comparación de los humanos…desde que tengo 18 años, he vivido entrenamientos para ser espadachina, desde los antiguos guerreros vikingos, los samurai, los caballeros medievales…todas las generaciones, todos los tipos de batalla diferentes, todos esos los he dominado...sin ningún faltante –explicaba Yukiro, orgullosa de semejante currículum.

-Eso explicaría…esa colección de espadas que tienes en tu espalda, y con esos pechos tan grandes, ¿no te duele la espalda?

-¡No son tan grandes! –Exclamó Yukiro un poco sonrojada –No tengo dolor de espalda…estoy acostumbrada a cargar con ellas.

-¿Tus pechos? –dijo Yui burlona.

-¡¡No!! ¡¡Mis espadas!!

-Y también tus pechos…

-¡Ya cállate! En todo caso…el descanso ha terminado.

-Creo que tienes razón.

Yukiro tomó la espada en sus manos y la cambió por otra al estilo francés, del siglo 17. Era muy fina y elegante, también delgada…parecía mas un arma de esgrima, pero se podía notar que estaba bien filosa, “No la subestimes, puede cortar el tronco de un árbol de un solo golpe”, decía Yukiro aclarándole a Yui, para intimidarla un poco.

Yui no tenia otra opción que luchar con su katana…pero sabia que esta katana era especial, por lo que tenia mucha confianza en ella misma. Dieron varios pasos hacia el lado…sin perder la mirada y la pose de batalla…y un rápido arrebato dio comienzo al combate.

Las armas sonaban fuerte, Yukiro y Yui empezaron a atacarse mutuamente, sus espadas chocaban muy rápidamente…tanto que llego el punto que provocaban muchas ondas de sonido, que empezaban a revolotear todo lo que tenían a su alrededor, tanto los árboles como los arbustos…y algunas rocas pequeñas y frágiles se veían rotas a causa del sonido. Las espadas no paraban de chocar rápido, Yukiro veía fijamente a Yui y sentía como el talento fluía por sus venas…”Esta niña, con tan poca edad, y es capaz de igualarme en el esgrima rápido”. El choque de espadas se vio terminada por el retroceso de Yukiro, por lo que Yui continuó poniendo presión sobre su contrincante, pero al intentar hacerla retroceder aun mas, Yukiro le dio una patada en el estomago para alejarla.

-Bien…veo que eres más hábil de lo que pensé, ¡felicitaciones! ¡Desde ahora eres declarada oficialmente, mi contrincante y enemiga! –dijo Yukiro mientras Yui tomaba el aire para incorporarse de nuevo.

-¿Debería agradecer eso? ¡Vaya que eres rara!

-Te diré algo niña…como espadachina tengo honor y modales, que tu no los tengas no es mi culpa.

-¿Qué pretendes decir? –preguntaba Yui con sospechas.

-Te propongo un trato, ya que tu orgullo esta bien alto, que te parece si subo mi nivel conforme va pasando el tiempo…

-¿Huh? No entiendo…

-Veras, entre mas antigua sea mi técnica…mas fuerte y hábil soy, conforme pase el tiempo yo iré subiendo de nivel y cambiando de arma… ¿te parece?

-Pues… ¿Por qué no?

-Genial…

Yukiro guardó su arma actual y la cambio por una mas gruesa, parecía mas bien un hacha…Yui observaba a la tan rara arma que su enemiga empuñaba…parecía ser que iba en serio, por lo que no tena que flaquear en ningún momento. Cuando Yukiro paso al ataque, Yui pudo percibir algo en ese ataque…su velocidad ya no era la misma, era mas lenta ahora pero su fuerza había aumentado considerablemente, al igual que sus puntos de ataque, ahora intentaba golpear en otros lados con lo que se le dificultaba el poder defenderse, y al lograr defenderse, la postura de su brazo hacia que la defensa no fuera tan fuerte…por lo que un ataque con todas sus fuerzas podría acabar con ella.

-Vamos, que esto apenas empieza –decía Yukiro sin ceder ni un golpe.

Capitulo 72 Enana vs Pervertido.

Capitulo 72 Enana vs Pervertido.

-¡¡Perra enana!!

-¡¡Enfermo sexual de segunda!!

Miory y Zherk se enfrentaban con mucho odio entre ellos, Miory con su 9mm disparaba ráfagas de espíritu rápidamente mientras Zherk lanzaba sus hechizos al igual de rápido que su contrincante. Ambos con una cara graciosa pero furica, los disparos chocaban entre si haciendo mucho ruido. Después de varios minutos de estar en el mismo plan ambos se detuvieron jadeando por el cansancio.

-¡Eres una perra dura de roer! –exclamó Zherk.

-¿A quien llamas perra? ¡Maldito enfermo sexual! –reaccionó Miory.

-¿Qué dijiste? ¿Me llamas enfermo sexual? ¡Maldita perra enana!

-¿Perra enana? ¡¡Maldito depravado!!

-¿Ah, si?

-¡¡Si!!

Después de esta pequeña discusión, Miory y Zherk pasaron de nuevo al mismo plan de antes, ambos se disparaban ráfagas y sus disparos chocaban entre ellos, teniendo una cara graciosa y de furia, no medían las consecuencias, simplemente disparaban. Por diez minutos continuaron en lo mismo hasta que volvieron a tomar descanso.

-Comienzo a hartarme de esto, si sigo así no llegare a ningún lado –pensaba Miory.

-Esto cansa… ¡demonios!

-Debo pensar en algo…debo encontrar alguna trampa para derrotarle –seguía pensando Miory aprovechando que Zherk comenzaba a distraerse en sus caderas.

-En fin –dijo Zherk –Creo que es hora de ponernos serios.

-Es lo único en lo que estoy de acuerdo contigo –repitió Miory.

Zherk comenzó con sus raros rituales, se cortó la palma de sus manos y la sangre caía al suelo de forma curiosa, cuando la cantidad de sangre fue la suficiente, se volvió color negro y subía por sus piernas mientras lo cubría…” -A esto le llamo…mi escudo capas de cebolla”, pensaba Zherk orgulloso del nombre tan “original” que le había puesto a su técnica de defensa. La técnica se dio por terminada, cubriendo a Zherk de sangre sólida negra, una capa de defensa, por eso el nombre “capas de cebolla”.

Por otra parte, Miory simplemente tomó una de sus dagas con la mano izquierda y su 9mm con su mano derecha. No tenía ningún tipo de técnica especial, ni ningún hechizo, por lo que humildemente simplemente hizo una pose de batalla indicando que estaba lista para la batalla.

Un minuto de silencio…

-Perra enana.

Miory se arremetió rápidamente contra Zherk, llena de furia por lo último que había dicho. Lo golpeó tan fuertemente que le hizo retroceder varios pasos, disparó a su estomago pero los disparos no surtieron ningún efecto. Miory se sorprendió por ello, “Imposible…tuvo que hacerle algo, no son disparos normales”.

Zherk aprovechó el factor sorpresa para contra-atacar, dio un puñetazo al rostro de Miory, haciéndole escupir saliva con un poco de sangre. Miory reaccionó a este ataque por lo que volvió en sí, Zherk se dirigía a atacar de nuevo pero los reflejos de Miory habían ganado esta vez, el otro golpe que venia a continuación fue igual de esquivado, esta vez con varios saltos acrobáticos hacia atrás.

-¿Qué rayos fue lo de hace unos momentos? Estoy segura que no falle, yo misma vi cuando le había dado en el centro del estomago, aun asi no le hizo ni siquiera un rasguño –pensaba Miory nerviosa.

-¿Sorprendida? ¿Atemorizada? Mi técnica es súper genial, por lo que no te sientas extrañada por esos sentimientos.

-Solo fue un descuido…no seas tan fanfarrón.

-No es que es que es la realidad.

Cansada de las discusiones, Miory atacó sin dejar que Zherk terminara su dialogo, lo que agarro a Zherk un poco desprevenido. Aun asi, Zherk logro defenderse con sus brazos de la patada que Miory había intentado propinarle, después un disparo en la parte baja de sus piernas, que tampoco surgió efecto, finalmente…Miory no tuvo otra opción mas que golpearle con su daga de su mano izquierda.

El golpe iba dirigido a la parte derecha del cuello de Zherk, iba con mucha potencia, toda la furia de Miory iba en ese golpe. El impacto se dio, se oyó un “crack”…la daga de Miory no logró atravesar todo el cuello de Zherk, sin embargo, logró hacerle una grieta a su “defensa de capas de cebollas”. Zherk estaba sorprendido, no creía lo que sucedía, su defensa había sido rota…pero no del todo.

-Je…je, je…je, je, je, je, parece que tu ataque ha fallado –dijo Zherk aliviado que el ataque no pasó a mas allá.

-¡¡No!! ¡Esta era una de mis únicas esperanzas! –pensó Miory decepcionada y con mas estrés aún.

“¡Ha!”, Zherk golpeó tan fuerte a Miory que la dejo tirada en el suelo por un buen rato…Miory comenzaba a darse por vencida, su defensa era muy difícil de penetrar, apenas pudo hacerle unos daños leves…sin embargo no lo suficiente.

-No…la batalla apenas está comenzando…aún queda algo –pensó Miory mientras estaba en el suelo.

Mientras Miory se levantaba, guardó su daga y tomó su 9mm con ambas manos… empezaba a moverse anormalmente, temblaba curiosamente, como si estuviera sobrecargándose…Zherk miraba lo que sucedía e inmediatamente supo que no era nada bueno. Sabia que tenia que evitar sea lo que fuera que Miory estaba planeando, asi que se apresuro a conjurar varios hechizos de ataque, mientras todos se reunían a sus espaldas.

-Si lo que ese adicto a las galletas nos dijo es cierto…estas joyas tienen que canalizar mi espíritu en esta arma, y las convierte en balas…si concentrara todo mi espíritu, debo hacer un disparo único y potente…no debo permitirme fallar –pensaba Miory mientras veía lo que Zherk preparaba para su defensa.

Haciendo un gesto con su brazo, todas las luces y ataques que Zherk estaba preparando se lanzaron contra Miory…En reacción, Miory comenzaba a moverse tan hábilmente semejante a una bailarina en su mejor y esplendido show que jamás había dado en su vida. Las pirotecnias del ataque masivo de Zherk hacia que muchas luces sobresaltaran y hubieran por como Miory esquivaba esos ataques, era algo totalmente digno de observar.

El “show” terminó, haciendo que Zherk perdiera de vista a su contraria, la buscaba desesperadamente, pero todo el humo y polvo levantado a causa de las explosiones no permitían ver claramente…hasta que pudo divisar una figura en medio del polvo.

Capitulo 71 El nacimiento de las rivalidades.

Capitulo 71 El nacimiento de las rivalidades.

-¿Derrotarnos? ¿Creen que somos tan inútiles para poder ceder tan fácilmente? –exclamó Yukiro.

-Déjanos ser, es solo entrenamiento –respondió Tonnosuke.

-Vernos como si fuéramos tan débiles, que solo somos para entrenamiento…chicos, no tengan compasión –dijo Yukiro tomando una de sus muchas espadas.

-Esto va a ser tan, interesante…pero ¿Quién se enfrentara a quien? –decía Tonnosuke levantando sus hombros.

Yukiro fue extremadamente rápida, en un pestañeo se encontró atacando a Tonnosuke de frente, pero había un ligero detalle…Yui bloqueó su ataque con su katana, mirándose ambas fijamente a los ojos. “-Tú serás mi oponente” dijo Yukiro mientras seguían entrelazando miradas. Ambas comenzaron a apartarse golpeando sus armas una contra la otra hasta que se perdieron de vista.

-Allá van dos… ¿el siguiente? –dijo Tonnosuke.

-Esa enana esta bien sexy –dijo Zherk

-¿Con eso quieres decir a que quieres luchar contra la enana…o que quieres “eso” con la enana? –preguntaba Ishiiro.

-¡Ambas! ¿Por qué no? Primero le hago “eso” y después lucho con ella –dijo Zherk lanzándole un guiño a Miory.

-¡¡¿¿A quien llamas enana??!! ¡¡¡Ven y dímelo en la cara!!! –gritaba Miory furica.

-Es toda tuya –dijo Ishiiro un poco atemorizado por ver la reacción de Miory.

-¡Bien! Oye tu –dijo Zherk mientras señalaba a Miory – ¡Vamos a pelear! ¡Tú y yo!

-¡Romperé tus piernas y las pondré en tu cabeza como sombrero! ¡¡Por decirme enana!! –gritaba

Miory y Zherk se alejaban del área observándose uno al otro, atentos a cada movimiento de su oponente…hasta que llegaron a verse a la lejanía y no se volvieron a divisar. Por otro lado, Ishiiro y Tonnosuke se analizaban rápidamente, antes que alguno de los dos tomara la iniciativa. Un mudo silencio…

-Entonces quedamos solo tú y yo… ¿Quién lo diría? –dijo Ishiiro rompiendo el silencio y asi ganar tiempo.

-Pareces ser un tipo un poco pasado de peso… ¿estas seguro de luchar contra mí? –dijo Tonnosuke.

-¿Qué acaso no lo parezco?

-Muéstrame lo mejor que tienes…

Ishiiro pensó en las palabras de Yukiro, “Chicos, no tengan compasión”. Comenzó a transformar su cuerpo, su cuerpo adelgazaba y sus brazos se hacían gruesos y musculosos. Los grandes brazos de Ishiiro sorprendieron a Tonnosuke tanto, que comenzó a reaccionar de una forma infantil.

Aprovechándose de la reacción infantil de Tonnosuke y su distracción, Ishiiro procedió al ataque, un movimiento rápido (tan característico de él) e intento golpearlo con uno de sus gigantes puños, pero en esa milésima de segundo de su ataque, pudo notar que una sonrisa se pintaba en el rostro de Tonnosuke. Después un estallido que alejó a Ishiiro de Tonnosuke.

-¡¡Imposible!! Ni siquiera pude notar el momento en el que se movió, pareció que se defendió con la mirada –pensaba Ishiiro sobre la defensa que había bloqueado su ataque.

-¿Qué sucede? ¿Acaso no ibas a tener compasión? No me has ni siquiera rozado, si ese es tu mejor golpe…es una total decepción.

A Ishiiro se le hizo muy familiar el aspecto de su contrincante…tenía el presentimiento de que lo había visto antes. Sin embargo, no podía dejar de luchar, tenía que derrotarle de alguna manera u otra. Ishiiro volvió a atacar con su súper velocidad estando en una milésima de segundo al frente de Tonnosuke. Tonnosuke hizo sonar sus dedos con uno de sus famosos chasquidos, el cual pareció no afectarle en lo absoluto a Ishiiro.

Ishiiro golpeo fuertemente el rostro de Tonnosuke destrozando el suelo donde el cuerpo de Tonnosuke fue impactado. Al ver a Tonnosuke tendido en el suelo, Ishiiro concluyo que no su enemigo no era tan fuerte como parecía ser. Comenzó a añejarse para brindar apoyo a sus compañeros, para asi ahorrar tiempo y energías.

-¿Acaso eso es todo? ¡Vaya decepción!

-¿Eh? –Ishiiro miró hacia atrás –No puede ser...ese golpe tuvo que haberlo dejado de combate por un buen rato.

-Sin embargo no lo hizo, admito que me dolió bastante pero no es lo suficiente para derrotarme –dijo Tonnosuke mientras se levantaba del suelo y sacudía el polvo de sus ropas.

Ishiiro volvió a atacar rápidamente y esta vez Tonnosuke lo esquivó, intentando de ver a donde había ido Tonnosuke, Ishiiro miraba rápidamente hacia todas las direcciones antes que fuera muy tarde.

-Si no te has percatado…los chasquidos anteriores no eran para defenderme, era para bloquear el paso entre los otros combates y el nuestro –Se escuchaba la voz de Tonnosuke en algún lado.

-¡¡Cobarde!! Preséntate frente a mí.

-La paciencia es una virtud…solo espera un poco.

Mientras tanto, Miory y Zherk seguían corriendo mientras no apartaban sus miradas uno del otro, Miory pensaba en alguna táctica para poder derrotar a su enemigo…Y Zherk simplemente se concentraba en la esbelta figura de Miory.

-¡Esta guapísima! ¡Definitivamente esta sexy! –pensaba Zherk con perversión.

-De alguna manera siento que la mirada de este tipo es algo…extraña –pensaba Miory mientras veía la cara de pervertido de Zherk.

Zherk detuvo el paso y de le siguió Miory. Ambos seguían en silencio, hundidos en su pensamiento, hasta que Zherk habló.

-Entonces…dime ¿eres virgen? –preguntó Zherk.

-¡¡¡¿¿¿Qué???!!! ¿¿Que demonios pretendes?? ¡¡Maldito pervertido!!

-Serás muy bonita, pero lo que tienes de bonita y enana lo tienes de obstinada, comienzo a cansarme de ti.

-El sentimiento es mutuo…¡¡¡Y NO ME LLAMES ENANA!!!