martes, 1 de noviembre de 2011

Capitulo 26 En el largo camino

Capitulo 26 En el largo camino

En un lugar angosto de rocas, lo que parecia un alcantilado, Yui y Miory estaban muy ocupadas matando a miles de demonios que les estaban interrumpiendo el paso, y como Raiton sigue discapacitado, pues no les quedaba de otra que trabajar duro.

Miory aprendio a canalizar su espiritu en su dedo y liberarlo al estilo de un arma de fuego, asi que no necesitaba de contacto fisico con los demonios.

Yui los atacaba con una de las katanas de Raiton, después de todo ella era buena en esgrima y tambien era habil, aunque no lo pareciera, y esta vez hacia un magnifico trabajo con todos los demonios.

Devolviendo al dia anterior, después del encuento con Lucy, el pequeño grupo espero a Kyousuke durante dos horas, sentados en la pradera naciente, hasta que al fin habia aparecido una especia de agujero negro, del cual empezaron a salir varios brazos, seguido salio Kyousuke que parecia un poco obstinado quitandose los brazos de encima.

-Estas cosas son tan molestas, replico Kyousuke.

-No me digas que…decia Miory.

-Tomando este portal los llevara cerca de la base donde se encuentra Kai, de ahí toman la ruta directo hacia el norte y tomando el camino del alcantilado, el angosto no el grueso, de eso llegaran a dar a una especie de cueva, entran alli y después de varios minutos de viaje podran ver un salon lleno de secuaces de Yukimura, el resto depende de ustedes, no ire en rescate de nadie, explicaba Kyousuke cuidadosamente mientras entraba al portal de nuevo.

-Bien…suena sencillo, decia Raiton mientras empezaba a entrar al portal.

-¿Estas seguro de esto? Raiton-san, pregunto Yui.

-No…, respondia Raiton mientras metia un pie.

-¿Huh?, decia Miory pensando en la gran idiotez de su compañero.

-Jeje, bueno no es tan ma--, a Raiton lo trago las manos del portal mientras hablaba y le interrumpio por completo.

-O rayos, decia Miory mientras intentaba mirar a travez del agujero,- Parece que se lo ha tragado, bueno es mi turno.

A Miory tambien la trago el agujero, dejando a Yui con miedo a ser tragada tambien.

-Creo…que es mi turno, dijo temerosa e igual que a los demas, fue tragada por el agujero.

Los tres se encontraron en un lugar lleno de manos que se disponian a atacar, preocupando al pequeño grupo.

-Yui…toma una de mis katanas y estate atenta, dijo Raiton.

-Aquí llovera sangre, decia Miory exaltada y un poco emocionada.

Las manos se movian lentamente, como los tigres acechan a su presa, y seguido atacaron.

Todos se movian hábilmente, Raiton intentaba lograr ver la salida pero las manos lo impedian. En un momento inesperado, las manos llegaron a atrapar a Yui.

-¡Yui!, dijeron en unisono Miory y Raiton.

-Jajajajajajajajajajajaja, Yui estallo en carcajadas.

La escena que estaba frente a Raiton y Miory llegaba a ser un poco absurda, las manos que infligian miedo y tenian intenciones “asesinas” estaban intentando de hacerles cosquillas a los presentes, asi que al capturar a Yui, pues le hacian cosquillas hasta el cansancio.

-Esto es patetico…, dijo Miory.

-Pienso lo mismo…, dijo Raiton.

Después de varias horas de lucha y cosquillas pudieron encontrar la salida y llegaron a dar a un gran desierto…otro desierto, pero este tenia montañas de roca gigantescas.

-¡¡¡No me jodas…!!!, exclamo Miory.

Pasaron la tarde entera caminando hacia el norte, tal como dijo Kyousuke, hasta encontrar dos caminos de un alcantilado, uno grueso y uno angosto, y tal como las instrucciones, se adentraron al angosto.

-Deberiamos detenernos y descansar aquí, decia Miory mientras se sentaba en una roca que se encontraba cerca, -Esas malditas manos maquiadelicas me dejaron realmente agotada.

-La apoyo, dijo Yui mientras se acostaba en el suelo.

-Admito que yo tambien…,decia Raiton tambien acostandose al suelo.

Y pasaron la noche en la entrada del camino descansando después de una maratón de cosquillas y una batalla para ser atrapados….

Al otro dia, ya con energias recuperadas, los tres volvieron a retornar su viaje, hasta que algo les llamo la atención. Habia un pequeño demonio con un libro en la mano y usaba un tipo de traje como la de un sacerdote.

-¡Malditos intrusos!, no os dejare cruzar esta linea, dijo señalando una pequeña linea pintada en el suelo y con una voz graciosa.

-¿Y que piensas hacernos?, tirarnos rocas jajaja, dijo burlona Miory.

-Sioghtmus viernichten di espiritu santi….amen, decia el pequeño demonio mientras una luz empezo a rodearlo.

Miles de demonios fueron invocados, dejando con gran asombro a Miory, Raiton y a Yui.

-Esto sera un gran problema…el pinche enano era muy maton después de todo, decia Raiton, -Chicas…¡preparense para luchar!

-Si

-Si

Y asi fue como llegaron a donde estan ahora, los demonios invocados parecian no tener fin, pero en un momento determinado pudieron acabar con todos.

-¡Malditos!, ahora los exterminare yo mismo, con mis propias manos.

El pequeño demonio empezo a crecer considerablemente, rompiendo sus ropas, apenas dejando lo suficiente para tener un estilo de pantalón roto. Se volvio extremadamente musculoso y grande, y su cara se volvio mas fea a causa del estiramiento, tirado babas como un perro.

-Ahora veran…jajaja enanos…, decia el demonio.

-¡¡¿¿A quien llamas enana??!!, ¡¡¡ahora sabras lo que es bueno estupido fenómeno!!!, gritaba Miory furiosa y sacando su famoso sarten.

-Yui, Miory, ustedes deben encargarse de este, yo por el momento no puedo hacer ni siquiera una invocación.

-Bien…dejanoslo a nosotras, dijo Yui mientras agarraba la katana fuertemente, por fin iba a entrar en batalla.

-¡Pagaras bien caro maldito fenomeno!

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